El Solitario desenmascarado

El delincuente más buscado de España ha sido detenido cuando se dirigía a atracar una sucursal bancaria. Su nombre es Jaime Jiménez Arbe, más conocido como El Solitario, actuaba desde hace más de trece años en bancos de toda España.

Está acusado de tres homicidios y decenas de atracos, fue detenido en Figueira Da Foz, una localidad al norte de Portugal, en una operación conjunta de la Policía Nacional y la Guardia Civil en colaboración con las fuerzas de seguridad portuguesas.

En el momento de la detención iba disfrazado con una barba, bigote y peluca falsos. Giménez estaba a punto atracar una sucursal de la Caixa Agrícola. "Llevaba un chaleco antibalas, varios juegos de esposas, una pistola ametralladora de calibre 45 y un revólver del 45, llenas de munición y listas para disparar y con cuatro cargadores extra debidamente cargados".

En una rueda de prensa multitudinaria, el abogado del detenido, José Mariano Trillo-Figueroa, ha querido mostrar los mensajes más importantes que le ha transmitido su cliente: él no es un asesino, siempre que disparó lo hizo en "defensa propia" y en realidad atracaba bancos porque estos también "roban" y "atacan los intereses de los españoles".

Las Fuerzas de Seguridad atribuyen a éste el asesinato de dos guardias civiles en Castejón (Navarra) el 9 de junio de 2004, y de un policía local el 10 de mayo de 2000. Tratar de demostrar que no tuvo nada que ver con la muerte de los guardias civiles, es la principal preocupación del atracador. Ya que es el delito más grave que se le imputa y sabe que conlleva la mayor pena y condena social. Según su versión, días antes de este atraco se le operó de una rodilla, por lo que no hubiera podido cometer estos hechos. Ha defendido que quien lo hizo fue un socio suyo, del que se separó después de ese asesinato.

No ha sido la única revelación de Jiménez Arbe. La mayor sorpresa fue la acusación que ha hecho al ex general de la Guardia Civil Enrique Rodríguez Galindo y al ex presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, de haber encubierto el asesinato de un pastor en Zafra hace once años. Según esta versión, después de un atraco de El Solitario a la Caja de Ahorros de una localidad extremeña, una patrulla de la Guardia Civil confundió a este pastor con el atracador, ya que viajaban en el mismo modelo de coche, y le tirotearon.